Salman Rafi Sheikh (Kasur, Punjab, Pakistán) es un periodista
independiente y analista de relaciones internacionales y asuntos de Pakistán.
Cubre la política del sur y el oeste de Asia, la política exterior de las
grandes potencias y la política pakistaní. Autor de The Genesis of Baloch Nationalism: Politics
and Ethnicity in Pakistan, 1947-1977. Prepara un doctorado en la SOAS University of
London.
La guerra civil de Afganistán está entrando en una nueva fase de desestabilización con el resurgimiento de los señores de la guerra y los muyahidines para hacer frente a la embestida de los talibanes.
Restos de dos atentados con bomba en Kabul en el que murieron
siete personas, 12 junio 2021
(Foto: Sayed Khodaiberdi
Sadat/AFP vía Anadolu Agency)
A medida que las fuerzas de USA y la OTAN se retiran más rápido de lo previsto de Afganistán, la violencia está aumentando en lo que podría ser un anticipo de una futura guerra más amplia.
Muchos creen que los talibanes tienen como objetivo explotar el vacío dejado por la retirada de las tropas de USA y la OTAN para tomar el control de la capital, Kabul, y restablecer un emirato islámico similar al que USA desalojó del poder después de su invasión de 2001.
En los primeros tres días de junio, al menos 64 miembros del personal de seguridad afgano y 26 civiles murieron en ataques de los talibanes. El más mortífero se produjo en la provincia de Nangarhar el 2 de junio, en el que al menos 40 miembros del personal de seguridad murieron al caer varios puestos de seguridad y una base militar en manos de los combatientes talibanes.
Las victorias de los talibanes en un campo de batalla en rápida expansión son una razón crucial por la cual las fuerzas militares de USA y la OTAN han acelerado sensiblemente sus planes de retirada. Al parecer, no quieren quedar atrapados en una guerra civil que se intensifica y se está moviendo rápidamente desde remotas áreas montañosas a las ciudades.
Los informes de los medios indican que más de la mitad de las fuerzas usamericanas ya han abandonado Afganistán y que la mayoría de ellas se habrán retirado para el 4 de julio, mucho antes de la fecha límite anunciada del 11 de septiembre.
Las fuerzas de la OTAN están asimismo más centradas en la retirada que en su misión de “entrenar, asesorar y ayudar”. El portavoz del Ministerio de Defensa alemán, David Helmbold, dijo a los periodistas en mayo que todas sus tropas, estimadas en más de 1.000, se retirarán a finales de la primera semana de julio.
Los soldados usamericanos recuperan sus petates tras regresar a casa, después de un despliegue de nueve meses en Afganistán, el 10 de diciembre de 2020 en Fort Drum, Nueva York. Supuestamente, todas las tropas usamericanas se retirarán de Afganistán antes del 11 de septiembre de 2021. (Foto: John Moore/AFP/vía Getty Images)