Featured articles en vedette Artículos Artigos destacados Ausgewählte Artikel Articoli in evidenza

Affichage des articles dont le libellé est CIPEMU. Afficher tous les articles
Affichage des articles dont le libellé est CIPEMU. Afficher tous les articles

22/02/2023

LUIS E. SABINI FERNÁNDEZ
Restaurante La Huella y la verdad de la milanesa*

Luis E. Sabini Fernández, 22-2-2023

Ninguna novedad saber que los medios de incomunicación de masas no informan la esquiva verdad, sino que configuran sus verdades, a menudo deglutidas de antemano.

El episodio del restaurante La Huella en José Ignacio, al este del dpto. de Maldonado es paradigmático.


En mayo de 2021, en plena matanza de palestinos mediante bombardeo de zonas civiles,[1] el presidente uruguayo, conservando un triste historial de apoyo incondicional de  gobiernos uruguayos al Estado de Israel no tuvo nada mejor que apresurarse a expresar su “solidaridad” con Israel ante “la violencia palestina”.[2] Martín Pittaluga, hispano-uruguayo y −alma mater de La Huella, observó la cruda realidad y comentó, muy contenidamente: “¿Solidaridad? En vez de condenar la violencia desmedida del gobierno reaccionario de Netanyahu. Más de 50 muertos es lamentable y triste.” [3]

Y como decía la abuela, en Uruguay “se armó la de San Quintín”.

La Huella era el restaurante que había logrado atraer al mayor número de clientes del entorno; se decía que ¡hasta mil diarios! Desde Punta del Este y alrededores. No se trata de población de bajos recursos, ciertamente.

Marcos Galperin, dueño y director del exitosísimo Mercado Libre, Jeordan Legon, dueño y director de Alnylam Pharmaceuticals entre muchos otros repudiaron el comentario de Pittaluga y anunciaron la voluntad de boicotear su hasta ahora tan atractivo restaurante. (los datos de estos dos últimos párrafos se basan en el artículo ya citado en nota 2).

Alguien con claro sentido práctico le anunció: “Acabás de perder chiquicientos clientes, dudo que ganes uno solo con lo que acabás de poner.” Buen ojo comercial, monetario. El desconocido citado por infobae remata: “Infórmate antes de poner cualquier guarangada”. Como si Pittaluga hubiera desbarrado; el calificativo “guarangada” para referirse a la compasión por tantos muertos califica la mentalidad y la moral de quien lo dice.

Aunque hubo aclaraciones y deslindes de Pittaluga, que, por ejemplo, aclaró que no era antisemita (lo cual es obvio, dada la enorme cantidad de judíos antiisraelíes y antisionistas críticos de Israel), la bula condenando a Pittaluga había echado a correr y era imparable.

Tenía su explicación. Buena parte de la red social de la CIPEMU –Comunidad Israelita de Punta del Este, Maldonado, Uruguay− tiene que haberse sentido disgustada con semejante juicio y condena en su propio mundo. En esa especie de minúscula pero significativa “República de Saló” que el CIPEMU  encarna en Punta del Este e inmediaciones, el cuestionamiento de Pittaluga debe haber sonado a blasfemia; pronunciando lo impronunciable.[4]

Es un hecho significativo. Porque Pittaluga con su honestidad intelectual y su frescura política ofició como el niño que señalara al rey desnudo en el muy instructivo cuento del Conde Lucanor sobre los tejedores pícaros que embaucaran al rey.

Pittaluga no señaló que el “terror palestino” de tirar cohetes Kassem que apenas llegaban a destino o globos incendiarios que apenas incendian, es una digna pero tardía respuesta a la violencia, ésa sí, efectiva y asesina, con que el sionismo arrasó a la población palestina sobre todo en las décadas del ’30 y ’40. Y no sólo a palestinos; a lo que se les opusieran, incluidos judíos, como el poeta religioso Jacob de Haan (1924), representantes de la ONU como Folke Bernadotte, sueco (1947) o  refractarios no violentos a las demoliciones de viviendas palestinas como la estadounidense Rachel Corrie (2003), entre otros muchos.

Pittaluga comentó con pesar, muy humano, de ver decenas de vidas destrozadas, de niños, mujeres, varones. Su posición fue lógica, no politizada. Una sana ingenuidad, diría yo.

Pasado el episodio, el intercambio de correos y mensajitos apurados, a Antía le quedó la tarea de desembarazarse del molestoso. El boicot estaba decidido.

Como queda políticamente penoso decir que se expulsa algo o alguien por decir verdades incómodas o juicios discrepantes, se echaron a rodar otros mecanismos. El primero, desatender o despreciar los hechos crudos; el segundo, buscar “buenos motivos” para “la excomunión”; ruidos molestos, daños ambientales, desacuerdos entre Pittaluga y Antía… todas excusas.

La Huella ya no va a abrir en José Ignacio, a 40 km de Punta.


Enrique Andrés Antía Behrens (Partido Nacional/Alianza Nacional), intendente [= gobernador o prefecto]  de Maldonado

Pero el exilio forzado, no buscado, es peculiar. Abandona la jurisdicción del CIPEMU que administra Enrique Antía;[5]  pero se muda cerquita, a la jurisdicción rochense de la misma laguna (Garzón). Estimo que a unos pocos km más al este. Tal vez, ni siquiera a 50 km de Punta.

Enhorabuena.

Esperemos que no surjan otros impedimentos de orden “superior”, impostergable: ruta cortada, zoonosis, quién conoce lo por venir.

*Expresión rioplatense: "la verdad de la milanesa" se refiere a que hay algo más de lo aparente, que hay un trasfondo...

Notas

[1]  Así resumió M. Freytas (IAR) la situación con Morir en Gaza (2021): “Israel ingresa, mata, destruye masivamente y se va. Y la masacre con demolición es diaria, precisa y selectiva. Lo que era periódico y cíclico (los bombardeos) se convirtió en rutina diaria. No hay principio ni final. […] Y la cúpula genocida de Tel Aviv ni siquiera se inmuta. Sigue matando y destruyendo burocráticamente. casi como un trabajo rutinario. Casi como una misión aburrida y agendada. Los pilotos israelíes hacen las demoliciones de relojería con los misiles, sepultan cuerpos humanos vivos debajo de los escombros, y vuelven a cenar con sus hijos a casa.”

[2]   Hay que tener mucho desparpajo moral para ver el daño de piedras palestinas  e  ignorar el de francotiradores de élite cómodamente situados para elegir dónde y cómo herir o matar palestinos.

[3]  Infobae, Buenos Aires, 13 mayo 2021.

[4]  No tomar a la República de Saló como exabrupto o insulto; nada más lejos. El sionismo, una de sus variantes principales, el revisionismo de VladimirJabotinsky (donde revistaba el padre de Benjamín Netanyahu) mantenía cordialísimas relaciones político-ideológicas con el fascismo y Mussolini les cedió un territorio en las cercanías de Roma para sus entrenamientos militares. La comunidad judía italiana de los ’30 adhirió mayoritariamente al sionismo y al fascismo.  No había contradicción.

[5]   El lector desprevenido se puede sorprender que se hable de jurisdicción del CIPEMU y de una suerte de gerencia de Enrique Antía. Pero mi lenguaje procura ser fiel a la realidad: cuando el CIPEMU dispuso la prohibición de albergar en las aulas púbicas fernandinas al Congreso Anual de Docentes de Historia del Uruguay, APHU, en 2016, el intendente Enrique Antía se apresuró a cancelar los locales ya cedidos al efecto. El argumento del CIPEMU: antisemitismo. La realidad: entre centenares de docentes de historia había un par sindicados como críticos, diría contenidos o tímidos, del comportamiento israelí.


10/07/2022

LUIS E. SABINI FERNÁNDEZ
De la formation des élites en Uruguay : le cas Rozenblum

Luis E. Sabini Fernández, 8/7/2022
Traduit par Fausto Giudice, Tlaxcala

La manière dont s'est amassée la grande fortune du directeur et fondateur du prestigieux Collège international de Punta del Este, repaire de l'enfance et de la jeunesse dorées de Maldonado et même de Buenos Aires, est connue publiquement depuis longtemps.

On le sait, car plusieurs journalistes ont reconstitué les étapes de cet entrepreneur, Rolando Rozenblum, qui a fait fortune grâce à la ressource éprouvée de la sous- facturation des ventes et donc de l'évasion fiscale et du blanchiment d'argent qui en découle. Ces mécanismes bien huilés lui ont permis, avec son père, d’amasser au Brésil un argent « noir » que la justice brésilienne a estimé, il y a plus d'une décennie, à 80 millions de dollars (avec la dévaluation caractéristique   de   cette   monnaie   il faudrait parler aujourd'hui de centaines de millions...).

Ils n’ont eu aucune difficulté financière pour graisser la patte des gardiens de la prison de Curitiba (et sûrement d'autres à l'hôpital par la suite, car l'évasion du père et du fils a eu lieu de là, où ils avaient été transférés de la prison pour être opérés, en 2007*), et pour mettre fin à leur condition de prisonniers pour une escroquerie aussi énorme. Notre entrepreneur de Punta del Este a sûrement accumulé une grande partie du capital évadé à la mort de son père, Isidoro.

Avec des variations anecdotiques, c'est le processus de nombreux hommes d'affaires, honorables, sans la portée d'une vicissitude qui, dans ce cas, a conduit le père et le fils en prison. Mais ce qui m'intéresse, c'est de rappeler l'origine de ces fonds qui, par des opérations cosmétiques successives, acquièrent prestige, culture et, bien sûr, consolident le pouvoir.

Comme tous les hommes d'affaires habiles, il est aussi un gestionnaire de relations flexible. L'argent ne bouge pas tout seul (même s'il s'accumule par inertie). Les contacts et les relations sont le grand facteur d'animation de ces déploiements.

Rozenblum a fondé, par exemple, le Collège international, avec un bâtiment plus qu'impressionnant et en payant, sans problème, une équipe d'enseignants, d'administrateurs et de gestionnaires du plus haut calibre.

Rozenblum en famille lors d'une fête de la CIPEMU à Punta del Este, janvier 2020

Il a également fondé la CIPEMU -Comunidad Israelita de Punta del Este y Maldonado en Uruguay- qui a renforcé non pas tant l'aspect économique, mais l'aspect social, relationnel et de prestige, dédié à ce qui est devenu aux USA le proverbial lobbying.

08/07/2022

LUIS E. SABINI FERNÁNDEZ
Acerca de la formación de élites en Uruguay: el caso Rozenblum

Luis E. Sabini Fernández, 8/7/2022

Se conoce públicamente y desde hace tiempo como se amasó la gran fortuna del gestor y fundador del prestigioso International College, de Punta del Este, asiento de la niñez y juventud dorada de Maldonado y hasta Buenos Aires.

Se sabe, porque varios periodistas han ido reconstituyendo los pasos de este emprendedor, Rolando Rozenblum, haciendo su fortuna por el ya trajinado recurso de subfacturar ventas y así escamotear impuestos y el consiguiente lavado de dinero. Bien aceitados tales mecanismos con su padre, en Brasil, fueron amasando una plata “negra” que la justicia brasileña estimó, hace ya más de una década, en 80 millones de dólares (con la devaluación característica de esa moneda habría que hablar hoy de cientos de millones…).

No tuvieron dificultades monetarias para untar la mano de guardias en la cárcel de Curitiba (y seguramente la de otros en el hospital después, porque la fuga de padre e hijo se concretó desde allí, adonde habían sido trasladados desde la cárcel para  una cirugía), y acabar con su condición de presos por tamaña estafa. Nuestro emprendedor puntaesteño seguramente acumuló buena parte del capital fugado cuando su padre, Isidoro, muere.

Con variaciones anecdóticas éste es el proceso de muchos empresarios, honorables, sin el alcance de una peripecia que en este caso llevó padre e hijo a la cárcel. Pero me interesa recordar el origen de estos fondos, que mediante sucesivas operaciones cosméticas van adquiriendo prestigio, cultura y, por supuesto, consolidando poder.

Como todo hábil empresario es a la vez dúctil relacionador. La plata no se mueve sola (aunque incluso se acumule inercialmente). Los contactos, las relaciones son el gran vivificador de estos despliegues.

Rozenblum funda, por ejemplo, el International College, con un despliegue edilicio más que impresionante y pagando, sin problema, un equipo docente, administrativo y gerencial de primerísima entidad.

 

Rozenblum con su familia en una fiesta de la CIPEMU en Punta del Este, enero de 2020

También funda la CIPEMU –Comunidad Israelita de Punta del Este y Maldonado en Uruguay– que afianza, ya no tanto lo económico, sino lo social, relacional, de prestigio, dedicado a lo que en EE.UU. se hizo proverbial como lobby.

El ingreso a la alta sociedad fernandina fue fulgurante. Y el contacto cada vez más estrecho con la élite política local, le permitió a Rozenblum ampliar sus giros económicos oficiando de contacto o nexo con el mundo empresario israelí. Como primer fruto de tales relaciones Rozenblum ofreció dotar a todo Maldonado de cámaras de seguridad para enfrentar los robos, a pagar por la comuna fernandina. Ese negocio, multimillonario, es claramente simbólico. Y ya hay otros “en carpeta”, como asesorarse desde la empresa israelí dedicada a desalinizar agua de mar (que en el árido Cercano Oriente es más que comprensible pero que en la húmeda región platense reconoce causas muy distintas…)